Antiguo zapato escita de hace 2,300 años fue descubierto en las montañas de Altái, en Siberia
Internacionales.- Esta exquisita bota de cuero rojo tiene un complejo diseño con cuentas que ha permanecido intacto por más de 2,000 años.
Los artefactos antiguos siempre ha intrigado a los historiadores e investigadores del arte por igual, pero rara vez los arqueólogos se encuentran con objetos antiguos que han sobrevivido miles de años en condiciones casi perfectas. Recientemente, fue descubierta una bota de mujer, decorada con patrones complejos, en las montañas del Altái en Siberia junto con otros hallazgos importantes, como joyas, comida y armas. Se cree que este impresionante zapato tiene 2,300 años de antigüedad, y tiene una suela hecha de cuero rojo suave y un diseño geométrico decorado con cristales de pirita y cuentas negras.
Todo apunta que este zapato pertenece a los antiguos escitas, un pueblo nómada que atravesó el continente euroasiático. Por su ubicación en las montañas del Altái, se cree que esta pieza forma parte de los tumulos funerarios de los escitas, que incluyen muchos otros objetos y ropa que se encontraron cerca de la bota. Al igual que otras civilizaciones antiguas, era costumbre que estos nómadas enterraran a sus muertos con elementos esenciales para ayudarlos a viajar al más allá. Los escitas generalmente construían estructuras en forma de cabaña de madera en el suelo para albergar a sus muertos, donde cada cuerpo se colocaba dentro de un ataúd de troncos lleno de sus pertenencias. Esta preparación meticulosa, junto con el permahielo de las montañas del Altái preservó la bota durante siglos.
El exquisito decorado en la suela de este zapato de cuero ha despertado mucha curiosidad y especulación en línea. Según los historiadores, los escitas a menudo socializaban frente al fuego mientras estaban sentados de rodillas, por lo que los detalles en la parte inferior de los zapatos serían visibles para los demás y, por lo tanto, un aspecto importante de la vestimenta de una persona. Algunos teóricos proponen que la bota se hizo exclusivamente para el entierro, lo que explicaría el excelente estado de la suela.
Este histórico zapato ahora forma parte de la colección de artefactos antiguos del Museo del Hermitage en San Petersburgo, Rusia.